Praga, ciudad de música

Praga, ciudad de música

La bella Praga es conocida como “la ciudad de las cien torres” por las características de sus construcciones. Adentrarse en la cultura checa se volverá fascinante para cualquier viajero que ame los museos y el arte.
EL TIEMPO

Tipo: continental
Temperatura: media anual de 9ºC. Invierno: promedio de 0ºC. Verano: no supera los 25ºC.

QUÉ VISITAR
• Museo Nacional:
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Bajo sus muros de estilo neorrenacentista se exponen elementos de la Prehistoria de Bohemia, Moravia y Eslovaquia; junto con materiales de la mineralógica, litológica, paleontología, osteología, antropología y zoología. Además guarda las medallas de los países europeos, ideal para los más curiosos.
Ubicación: Plaza de Wenceslao.
• Museo Judío:
a modo de contracara se erigió este museo, con el objetivo de proteger las reliquias de las sinagogas de la ciudad. Sus 40.000 piezas y 100.000 libros se reparten entre los edificios que lo componen: las sinagogas Maisel, Española, Pinkas, Klaus, el Antiguo Cementerio Judío, la Sala de Ceremonias de la Sociedad Funeraria y el cementerio judío de Žižkov. Todos ellos se hallan en el antiguo gueto de Josefov.
• Otros sitios para visitar son: museos Alfons Mucha, Franz Kafka, Sex Machines y Museo del Jueguete.
LA QUINTA SINFONÍA
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El barrio de Smíchov tiene la suerte de ser el sitio donde Mozart compuso Don Giovanni. Su antigua residencia hoy se conoce como el museo Casa de Mozart. La famosísima ópera se estrenó en el Teatro de Praga.
PRAGA: EL INTERIOR
Una de las particularidades de esta ciudad es la subdivisión que tiene en su interior, la Ciudad Vieja, la Ciudad Nueva, la Ciudad Pequeña y el Barrio Judío, entre otros más.

Barrio chico
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Mala Strana, conocido como “el barrio pequeño” resplandece por sus inigualables palacios, iglesias y plazas. Allí se encuentra el Monasterio de Strahov que aloja las iglesias de la Asunción de la Virgen y de San Roque, junto con las Bibliotecas Filosófica y Teológica. En la Plaza de Malá Strana se halla la Iglesia de San Nicolás, que data del 1710.

Ciudad vieja
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El símbolo más importante es el Puente Carlos que atraviesa el río Moldava uniéndose con la Ciudad Vieja. El rey Carlos IV fue quien puso la primera piedra, al comienzo de su construcción en 1357. Su 500 metros de largo dieron paso a carruajes durante muchos años, hasta convertirse en peatonal. Son 30 las estatuas que acompañan el trayecto de los caminantes, entre ellas la de San Juan Nepomuceno, en el punto exacto donde éste fue arrojado al agua. La leyenda dice que si se pide un deseo poniendo la mano izquiera en la base de la estatua éste se le concederá.

La “ciudad vieja” en realidad se llama Atare Mesto. Fue el eje del origen medieval. El lugar preserva la Iglesia gótica de Týn, conocida por la pareja de torres gemelas que se alzan por encima de los tejados de la plaza de la Ciudad Vieja. En su interior se guarda una pila bautismal de peltre de 1414, una Crucifixión de principios del siglo XV, el altar mayor barroco, de 1649 y la tumba del astrónomo Tycho Brahe.
Barrio judío
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Una de las sinagogas más antiguas de Europa está enclavada en esta parte de Praga, más precisamente en el barrio judío. Se fundó en 1270 y es uno de los primeros edificios de estilo gótico de Praga.
Finalmente, el Ayuntamiento Viejo es quien contiene el famoso Reloj Astronómico que data del 1410. Cada vez que éste da la hora salen figuras que representan los doce apóstoles y otros personajes. El más peculiar es un esqueleto, que con movimientos afirmativos de la cabeza recuerda la inminencia y universalidad de la muerte. El interior del mismo puede ser visitado, recorriendo el Calendario de Mánes, pinturas de los meses del año, los signos del zodíaco y el Escudo de Armas. La función original del reloj era representar las órbitas del Sol y la Luna.

ARQUITECTURA Y RELIGIÓN
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Como no podía ser de otra forma, el castillo más grande del mundo se encuentra en esta ciudad. Se trata de una construcción del siglo IX compuesta por palacios conectados por callecitas pequeñas y pintorescas. Una de ellas es el Callejón de Oro, donde vivieron orfebres y artesanos en sus casitas de colores. Desde 1918 funciona como residencia presidencial. Conocer la Catedral de San Vito es imprescindible. El increíble período de tiempo que ocupó su edificación y apertura al público, se extendió desde el 1344 hasta el 1929. La Basílica alberga la tumba de Wenceslao IV, las Joyas de la Corona y el lugar de coronación de los reyes de Bohemia.A su vez, el sitio de peregrinación más importante de Praga es El Loreto, enorme edificio donde se halla una réplica de la supuesta casa de la Virgen María. Del lado opuesto a la puerta principal está la Iglesia de la Natividad quien tiene reliquias bastante siniestras como dos esqueletos vestidos y máscaras de cera en el altar. No se puede dar un paseo por El Loreto sin ir al museo de objetos litúrgicos. El Diamond Monstrance de fines del siglo XVII contiene 6.222 diamantes incrustados, un verdadero tesoro.