Lisboa: rincones imprescindibles

Existe una ciudad donde se juntan los legados de muchas sociedades: Lisboa . Por allí pasaron y reinaron fenicios, griegos, cartagineses, romanos, musulmanes e ingleses; quienes trajeron de sus expediciones parte de la cultura brasileña.
Entre expansiones marítimas y el puerto más importante de Europa hoy perduran muros tallados en los edificios históricos; monumentos rodeados por faroles antiguos, con luces amarillentas; callecitas empedradas y escaleras infinitas; tranvías amarillos; gastronomía aromática y muchas, pero muchas palabras, que definen cada rincón como si formaran parte de sus cimientos.

Es el barrio más antiguo de Lisboa , donde algún día vivieron los pescadores del pueblo.
Cómo llegar: tranvía número 28.

*El Fado: para nosotros es el tango, para los portugueses el fado; una música nostálgica y un poco triste que va narrando “la historia que no pudo ser” de aquella colonia que quiso independizarse y no encontraba la forma.

*Sé: así es llamada la Catedral de Lisboa , que tuvo que ser restaurada luego del famoso terremoto de 1755. Lo interesante de su interior son los objetos romanos, medievales y árabes encontrados en su interior hace pocos años.
Dirección: Sé Catedral de Lisboa , Largo da Sé
Horario: todos los días de 9:00 a 19:00hs. El claustro abre de 10:00 a 18:00 y el Tesoro hasta las 17:00hs
Cómo llegar: tranvía 28 y 12. También en Bus – línea 37- y Metro a Baixa Chiado.

*Castillo de San Jorge: toda ciudad víctima de invasiones tiene su fortaleza, como Lisboa tiene a este fastuoso castillo desde el cual se obtienen las mejores fotografías panorámicas del centro histórico. Después de visitar el museo, te va a encantar comer algo en su bar interno.
Horario: de noviembre a febrero de 9:00 a 18:00hs y de marzo a octubre hasta las 21:00hs.
Cómo llegar: línea 28 del tranvía a Miradouro Santa Luzia y autobús 37 a Castelo.

El barrio de los monumentos. Se halla sobre el mar y es el lugar desde donde partían los colonizadores.
Cómo llegar: tranvía 15 desde la Plaza del Comercio.

*Torre de Belém: el sitio ideal para viajar en el tiempo curioseando por las ventanas con cañones defensivos, entrando a las celdas y mareándote un poco en las escaleras de caracol que llevan a la terraza. Desde allí vas a ver la estatua que hace honor al primer rinoceronte que llegó a Europa desde la India en 1513.
Horarios: en invierno de 10:00 a 17:00hs y en verano hasta las 18:30hs. Abierto todos los días.
Cómo llegar: línea 15 del tranvía o tren a Belem, línea de Cascáis. Autobuses: 27, 28, 29, 43, 49, 51 y 112.

Fueron los frailes del monasterio quienes dieron origen a la receta secreta con la que se elaboran los añorados pasteles portugueses. Podés visitar la fábrica y conocer sus cocinas o relajarte en el Emporio do Chá (av. París 17ª). Otro sitio muy similar es el café A Brasileira ubicado en la calle Garrett 120.

La parte alta del centro histórico de Lisboa se enmarca en bares, música, alegría y vida nocturna; mientras que un poco más abajo está la reconstrucción del barrio más afectado por el terremoto, unidos mediante el Elevador de Santa Justa. Se dice que fue uno de los discípulos de Eiffel quien estuvo a cargo de su construcción.

*Plaza del Comercio: la principal. Resultan bellos todos sus ángulos desde los cuales es posible observar el gran río Tajo y el Arco del Triunfo de la Rua Augusta. Si te acercás a la orilla, podés pisar las escaleras que utilizaron los más grandes monarcas al desembarcar en Portugal.

«QUE LAS VIRTUDES DE LOS MÁS GRANDES SEAN UNA ENSEÑANZA PARA TODOS»

*Catacumbas romanas: si tenés la suerte de viajar en septiembre puede que coincidas con los únicos tres días al año que abren al público las Catacumbas Romanas que datan del año I d.C. y fueron el lugar de culto religioso durante mucho tiempo en Lisboa . Dato: son muy estrechas, no aptas para claustrofóbicos.